viernes, 30 de enero de 2009

Donde estas Ana?


Hoy te extrañé mucho, me lamenté de que te hayas ido. Loré mucho tu pérdidaby recordé lo bien que me guiabas: Si nunca llegue a ser tan perfecta como tu, estuve mas cerca de lo que estoy ahora.

Ahora estoy a 10 kg de la última vez que estuvimos juntas, te fuiste y me dejaste a Mia, que es tan mala y estrticta como tu. Tambien me quiere, pero su método no es tan bueno.

Contigo me sentia mejor, ahora no paro de llorar y no paro de pensar en ti. Incluso hoy llorando te busque a gritos "¿porque te fuiste Ana?". Te extrñé mucho y me lamente el haberte dejado.

En cuanto a Mia, no me gusta mucho, pero por ahora no se como acercarme de nuevo a ti. Mia tambien me restringe la comida, pero no tanto como tu, asi q creo q me acostumbre a eso.

Me sentí mal por haberlas traicionado y deceado de que se fueran, las sentí muy enojadas y por ello creo q han sido tan duras ultimamente conmigo y no han hecho mas q hacerme sentir mal.

Si, se que son malas y que me llevan poco a poco a la muerte, pero estoy tan acostumbradas a ustedes que no veo mi vida de otra manera. Por hoy, creo q trataré de regresar a ti, Ana para llegar a ser casi perfecta otra vez.
Sé q muchos me van a decir q esta mal, y sé q es cierto, pero creo q sufro mucho mas sin ti que contigo.
Con rencor Iris.

lunes, 26 de enero de 2009


Bueno, el día de hoy me inspiró Princesse a escribir acerca del doble rol que tomamos entre nosotras.
Si, es dificil de describir, pero es algo asi:
-Yo: me siento mal, super gorda y fea.
-Amiga: mal porq? estas super bien y eres muy linda.
-Yo: si, yo se que piensas eso, pero yo no me siento asi!!
-Amiga:piensa en que estas sana y enserio te ves muy bien
-Yo: quisiera no comer en 3 dias y vomitar lo q me comí.
-Amiga: no lo hagas!!! recerda q eso te hace daño
-Yo: si, pero no me importa porq me siento mal
Y asi sigue la plática... Y yo, egoistamente, siento q la q esta bien soy yo y que mi amiga me dice q no lo haga por salud (cosa q me vale un cacahuate en ese momento) aunq talvez si piense q deba bajar algunos kilitos o tal vez no... yo quiero bajar y en ese momento no hay mas. Aqui yo asumo el rol 1, en el cual yo soy la enferma y aveces hasta loca.
¿Pero q pasa cuando es alrevez? Entonces los roles se invierten, y asumo el rol de "protectora" (encargada de decir q no vomites, come bien, controla la ansiedad, etc). y una preguntita mas ¿porque asumo el chingado papel de las cosas q me hartan? porque sé q tengo q comer, pero me enojo cuando alguien me lo dice porque sencillamente no quiero... es decir, sé que tengo q apoyar a mis amigas, se que lo q hacen no siempre esta bien pero ¿para que les digo lo que ya saben y q tanto nos molesta?
Bueno, hay q decirlo porq no puedes ver como tus amigas se matan poco a poco, pero no puedes decirlo puesto q no tienes esa autoridad moral despues de que ni tu misma te controlas. En pocas palabras ¿que se hace en esos momentos?
Si alguien tiene la respuesta.. ¡Démela! porque por lo pronto no haré mas q decirles: "coman bien, nada de vomitos y nada de atracones, chicas ¿ok?"

viernes, 23 de enero de 2009

¿El placer de comer?


Un día de estos, acordandome de mis primas q viven en Texas, mi mamá y yo etstabamos sorprendidas de su manera de comer: en exceso, casi ahogandose, de una forma realmente asquerosa. La mas chica de ellas tiene como 16, mide como 1.58 y ha de pesar como 110 Kg, y no exagero!!

Su papá decia q no sabia porque estaban "gorditas" si no comian mucho (what? si yo veo q si!!) y que él queria bajar ya de peso porque se sentia mal (él ha de pesar como 90 Kg) pero que comia avena y no bajaba de peso. Me daban ganas de preguntarle en q cantidad comia, pero me aguanté.

Bueno, pero el proposito de esto no es criticarlas, porque cada quien tiene su cuerpo y tanto lo estan matando ellas como yo y yo no soy la indicada para juzgarlas. Pero mi mamá me dejó pensando cuando me dijo "es que creo q nuestro problema es que pensamos que la comida es un placer" y, al menos creo yo, que ese es nuestro problema.
Nosotros, como anorexicas o bulimicas creemos que podemos vivir sin ese "placer" o disfrutarlo al máximo para vomitarlo como quien juga un tanto en la compu y la deja tal y como estaba para que nadie notara que la tomó para jugar, como para que nadie vea que se dió ese "placer". En el caso de las personas con sindrome de comedor compulsivo pues siento que es un "pues si el placer esta ¿porq no lo voy a tomar?"
En el caso de las personas "normales" (es decir, sin TA) tambien lo toman asi, por eso en una fiesta se come, es como un "estamos felices y vamos a disfritar de el placer de comer" apoco no?
¡Eso es! creemos que comer, mas alla de una necesidad, es un placer y no, lo debemos de tomar como lo que es: nuestro combustible para movernos día a día y creo q esta es una razon por la cual existe tanto sobrepeso ¿como te puedes resistir al placer de comer?
No se si me dí a entender, pero si sé que esta no es la causa principal por la q coma o no, porque sé que mas al fondo hay algo mas grande... pero al final creo q puede ser una de las razones.

domingo, 18 de enero de 2009

Amanecí y no se porque


Anoche lloré mucho, y lloré porque me duele no ser normal, porque me aterran cosas tan comunes como "una comida familiar". Porque deseaba poder ir al paseo, hasta que la palabra mágica sonó "Y de ahi, nos vamos a comer", fue entonces cuando dije que no queria ir, fue ahi cuando quise llorar mucho y me tube que aguantar, fue ahi cuando me sentí acorralada, fue ahi cuando me di cuenta de que mi vida dejó de ser vida hace como 6 años, y fue ahi cuando se vino un efecto dominó.
Me di cuenta de que soy muy tonta, muy egoista. Me di cuenta de que me voy a quedar sola. Un amigo o 2 es normal que se vallan, pero cuando han sido casi todos: la del problema soy yo, y si, poco a poco todos se han estado yendo, me han abandonado. No solo amigos, tambien familia, y asi, voy a estar siempre sola, talvez acompañada de Ana y de Mia porque ellas no se van aunque las corras. Así voy a vivir, sola, llorando en una cama, reprochandome el ser como soy.

Finalmente, en mi cama le pregunté a Dios mil veces el porque seguia aqui. Diez mil mas le dije que si se habia olvidado de mi y nunca oí su respuesta. Me dormí llorando y reprochandome mis estupideces hasta que amaneció. Amanecí y no se porque.

Ya no quiero vivir! Ya no quiero llorar! Y hoy, sé que voy a llorar mucho.

viernes, 16 de enero de 2009

¿Por que no vas a la institución?


Me preguntan a cada rato el porque no he llamado a la institución, y se que no es facil entender el porque alguien se quiere dejar morir fisica, mental y emocionalmente.
Les voy a decir que no es fácil asimilar que te puedes morir por lo que creiste que estaba bien, sientes que traicionas sus ideas, tu vida y tus amigas y que tu forma de ser y todo por lo q tanto luchaste es una ENFERMEDAD!! Si, luche a lo pendejo!!
Sería como si te despertaran y te das cuenta de que no eres quien creias que eres, que tu realidad es otra, que tu vida es otra... nadie soprtaría eso tan fácil.
Y ni hablemos del panico a engordar! yo quiero bajar 10 kg y seguramente no voy a poder. Llevo casi 3 años deseando llegar a pesar 47 y ¿que creen? que si ento a la fundación no me van a dejar bajar de los 55!!!
Dios!!, me dan ganas de chillar solo de pensar que me voy a ver asi siempre. Si, se que probablemente al final del tratamiento me guste verme en el espejo, pero hoy no puedo y no quiero que las cosas sean asi. Quisiera una vida diferente.
Y si, tengo tambien miedo de hablar de cosas pasadas y que me dolieron. No quiero reabrir heridas, ya no quiero llorar, ya no quiero pensar en que estoy enferma, ya no quiero pensar que mi mete es la que esta mal.
Quisiera pedir perdón, no se a quien, pero perdón, porque yo solo queria alcanzar la perfección y terminé jugando a la ruleta rusa.

jueves, 15 de enero de 2009

Mi vida entre Ana y Mia


Era una chica de 13 años normal, acababa de entrar a la secundaria, una chica de 1.60 mts y 88 Kg, si, gorda, pero no acomplejada. Me preocupaba más que mi apariencia, mi salud. Un día, dos chicas muy lindas se acercaron a mí:

-Yo soy Ana y ella Mía- dijo una de ellas.

Hablamos por un tiempo, Ana hablaba más que Mía. Sentí más simpatía por ella y después de un tiempo de charlar, Mía dijo:

-Nosotras te podemos ayudar a llegar a la verdadera perfección.

-Mi mamá dice que solo Dios es perfecto. Aparte yo soy buena estudiante, buena hija, buena persona. Soy casi perfecta ¿Qué falta?- dije un poco asustada

-No, tú no entiendes. La perfección es espiritual, mental y FISICA.- Contestó Ana

-Bueno, en lo espiritual: voy a misa, hago el bien, ayudo a las personas, etc.; mental: pues no estoy loca, es más, soy inteligente; y física pues gracias a Dios estoy completa.

- Cuando hablamos de perfección no nos referimos a eso. ¿Nos ves? ¿Podrías decirnos algún defecto nuestro? No, somos perfectas. Nosotras sabemos la forma para que dejes de ser la burla de todos, para que seas reconocida como las modelos, para que todos hablen de tu perfección total. Para que seas una triunfadora en la vida, para que todos y todas te vean y sepan que eres el éxito.- Ana añadió.

-Bueno, ¿y qué tengo que hacer?- dije finalmente.

-Pues a pesar de que Ana y yo somos muy buenas amigas, tenemos métodos diferentes para llegar al resultado. Así que tienes que decidir cuál de las dos va a ser tu consejera.

Sentí más simpatía por Ana, por lo que la elegí a ella.

Al siguiente día apenas me levanté oí:

-Hoy no desayunaras.

-¿Qué? Acostumbro desayunar, tomar el lunch, comer y cenar. Me va a dar hambre.

-¡Te la aguantas!- Grito muy enojada Ana

- Mi mamá no me va a dejar, siempre me hace desayunar.

-Dile que te duele el estomago, que se te hizo tarde, que no tienes hambre, que estas enferma…-
Dio como 40 opciones, elegí la primera y use una distinta cada dia hasta que mi mamá ya no me insistió para desayunar.

-¡Tengo hambre!- Le repetía toda la mañana.

-El hambre es para las personas débiles. Tú tienes voluntad y fuerza. Si tienes hambre, cuenta hasta mil, verás que tu mente es más fuerte. Y si no, calma tu ansiedad con chicles.

Al cabo de cómo 3 meses, ya no me daba hambre y gastaba mucho en chicles, pero tampoco había bajado de peso. Casi ya no veía a Ana y yo tampoco la buscaba, por lo que solo no desayune por el próximo año.

Con el tiempo ella regresó y se volvía mas ruda conmigo, me decía que estaba fea y gorda, que nadie como yo podría triunfar. Cuando me convenció de esto me pidió que no tomara el lunch. Mis amigas me preguntaban porque ya no comía y Ana (detrás de mí) siempre me dio un buen pretexto para darles, siempre me los creyeron y terminaron por ya no insistir.

Estaba creciendo y ya tenía 14. Mi novio me engañó con una compañera, no lo quería y no me importaba mucho, pero Ana me decía que a las gordas como yo siempre les pasaba eso. Y si, a mis compañeras “delgadas” todos las buscaban, Ana decía que era porque el amor (de cualquier tipo) era inversamente proporcional al peso, por eso nadie me quería. También comencé a ir a fiestas donde acostumbrábamos bailar, platicar, jugar botella, tomar tequila y fumar.

Ana siempre estaba junto a mi, hasta en las fiestas y me decía que todo eso estaba bien:

-¡Toma! Cuando tomas no te da hambre, te la pasas super bien, eres extrovertida, etc.

Fue una etapa muy loca en mi vida. Estaba ebria 1 o 2 días a la semana, fumaba 3 o 4 cigarros al día, no tuve novio por 2 años, sin embargo besé a todos mis compañeros de clase, no hacia tarea y acostumbraba salir de mi casa a las 6:30 am y regresar a las 9 o 10 pm, Ana decía que todo iba muy bien. Así acabé la secundaria con 8 kg menos.

Entré al bachillerato a los 15. Igual, no desayunaba y no tomaba lunch, pero mis compañeros no tomaban alcohol, lo que me hizo que me aplacara. Fue entonces cuando todas las mañanas me sentía mal: nauseas, mareos, dolores de cabeza, ardor en el estomago y me llevaron al doctor: el esfínter en el estomago llamado píloro no me funcionaba, por lo que los ácidos subían y bajaban por mi esófago. La solución era una operación con la cual se enredaba el estomago alrededor del esófago para que cumplirá la función del píloro. Me urgía la operación, pues con esto mi estomago iba a reducir su tamaño. Ana me felicitó saliendo del quirófano.

-Esto va a ser mucho más sencillo ahora que tienes tu estomago más pequeño. Esta es la mejor noticia que te pueden dar.

Si, ya no me daba tanta hambre y comencé bajar de peso. Había llegado a los 75 Kg a mis 16. Poco a poco inicié mi vida normal de nuevo y ya no baje. Fue ahí cuando Ana se puso peor.

-¿Eres estúpida o que?

-¿Qué pasa, Ana?

-Estas comiendo mucho. Y yo no puedo perder el tiempo con alguien como tú.

-Perdón, Ana, comeré menos.

-Sí, ahora vas a comer una vez al día.

-Sí, yo se que lo haces por mi bien.

Para que no me diera hambre estaba mucho tiempo en la escuela, me quedaba a hacerles compañía a mis amigos hasta 5 hrs después de que habíamos salido de clases y Ana me ayudaba a decir más mentiras para no comer. Un día decidí comer con mis amigos una torta en la escuela.

-Si vieras lo mal que te ves comiendo. Das pena, pareces un cerdo, y te tengo malas noticias: esa estúpida torta acaba de echar a perder tu última semana. A partir de ahora comerás entre 800 y 1000 kcal.

Las desglosé asi:
Pasta cocida: 368 kcal
Pollo: 85 kcal
Manzana: 52 kcal
Plátano: 90 kcal
Pan integral: 239 kcal
Calabaza: 24 kcal
Zanahoria: 42 kcal
Calorías totales: 900 kcal

Tanto amigos como familia me invitaban a fiestas, las cuales a mi me encantaban. Pero el problema era cuando me invitaban a comer, eso era algo viejo para mí: inventar pretextos, pero ya nadie me los creía, me querían obligar a comer o se ofendían por qué no lo hacía. Todos me veían raro porque mientras otros comían yo me concentraba para aguantar el hambre. Pronto deje las fiestas tanto de familia, como de amigos, me sentía incomoda en ellas. Así, todos los viernes me quedaba en mi cama llorando por no estar con mis amigos, sintiéndome mal e infeliz.
Así fue mi vida por 2 años. No he vuelto a probar un pastel, una pizza, un huevo… muchas cosas porque tienen demasiadas calorías. Ni siquiera he vuelto a tomar leche, porque sus 68 kcal prefiero comerlas que tomarlas. Ahora me falta calcio, me duelen las articulaciones y me truenan casi cada que me muevo. Así fue como a los 18 ya pesaba 60 Kg, casi 30 kg menos que hacía 5 años y 15 Kg menos que hacia 2 años.

Así pasó todo un año. Hasta que Ana me dijo:

-¡Muy bien! Ahora bajaras. Comerás entre 500 y 530 kcal- Me exigió Ana por lo que lo convertí asi:
Pollo: 85 kcal
Calabaza: 24 kcal
Zanahoria: 42 kcal
Pasta cocida : 368 kcal
Calorías totales: 519 kcal

La pasta a veces la eliminaba para variar las calorías. Ana decía que eso era bueno para que mi cuerpo no se acostumbrara.

Me pesaba 2 veces al dia y ya no salía. Ni siquiera se tomaban la molestia de invitarme pues nunca iba. Me daba miedo salir a la calle pues casi me desmayo en el metro 2 veces estando sola, otra por estar enferma de gripa, y otra por el calor, o eso creí. Siempre tenía frio y aparecieron ojeras en mis ojos. También tomé un color amarillo pálido horrible. Hacer cualquier esfuerzo me provocaba mareos, se me bajaba a presión y me corazón comenzó con arritmias. Asi llegue a los 52 Kg a los 3 meses de consumir 500 kcal diarias.

Pero ya no podía mas. Me sentía muy mal, muy triste y a pesar de que hacia lo que Ana me pedia, ella me seguía diciendo que estaba gorda y me veía en el espejo y veía que era cierto, lloraba hasta quedarme dormida y al siguiente despertaba llorando. No encontraba la razón para seguir viviendo, aquella mujer perfecta que Ana prometió, no estaba, seguía gorda, pero ahora sin amigos, alejada de mi familia, sola, sin metas. Muerta de alma. Y encima oír comentarios como “te ves mal estando tan delgada”. Todo esto me mató y apenas tenia 20.

-Esto no fue lo que tú me prometiste, Ana.

-Es que aun no acabamos. Tu peso debe de ser de 45 Kg.

-¡Pero yo ya no puedo, no puedo ni seguir viva, me duele el alma!

-Déjamela, Ana. Es mi turno- Interrumpió Mía.

-¡No, ya déjenme!- pedí

-Es que Ana es muy exigente. Yo no, conmigo no vas a tener hambre, puedes comer todo lo que quieras porque no vas a engordar.

-¿Y cómo logras eso?

-Fácil, solo aprende que no comerás nada sin pagar todos y cada uno de tus pecados, toda y cada una de las calorías las vas a eliminar. Así que ve y come todo lo que puedas.

Comí, sola, como nunca en mi vida: pan, cereal, tortillas, galletas, palomitas, miel, hot cakes, hasta que el malestar me hizo parar. El dolor en mi estomago hizo que parara y sentí haber traicionado a mi amiga Ana. Lloré y lloré, me sentí sucia y muy mal.

-¿Ahora qué?- le pregunté

-Tu penitencia es vomitarlo todo.

-Pero quizás no pueda, debido a la operación el doctor dijo que probablemente ya no podría vomitar ¿ahora qué? ¿Todo está perdido? ¡Voy a subir como 5 Kg por tu culpa!

-¡Inténtalo¡

Duré 3 horas queriendo vomitar y no pude. Lloraba y me sentía muy mal de haberlo hecho. Sentí que era el peor error que había cometido, me veía en el espejo y veía como todo lo que me había comido me iba haciendo más gorda cada segundo. Al final Mía me dijo:

-Todavía te quedan 3 opciones: laxarte, ayunar o hacer ejercicio.

Ayuné 24 hrs e hice 3 horas de ejercicio. Poco a poco llené la alacena con cereales principalmente para cuando me ganara la ansiedad, pero también me sentía peor por no poder deshacerme de todo lo que comía. Me repetía mil veces que ni eso podía hacer bien.

Y así han pasado estos últimos 2 años, ahora tengo 22 y peso 60 kg. Vivo con atracones que concluyen en un sentimiento horrible y golpes en el estomago, ayunos de entre 24 a 40 (eso sin contar que Ana me dejo la manía de NUNCA desayunar), ejercicios, culpabilidad y llanto. Asi han pasado, casi sola, sin salir a fiestas ni reuniones, huyendo de las comidas pues solo puedo comer frente a 5 personas que son de mi confianza: mamá, papá, hermana, y abuelos. Sintiéndome mal después de comer (física y mentalmente). Llorando, con ideas de suicidio, hiriéndome, ideando formas de provocar dolor, etc.

Habia oído de la anorexia y la bulimia. Era algo simple: si no comes eres anoréxica, si vomitas todo lo que comes eres bulímica. Y no es asi. La anorexia es un transtorno alimenticio (TA) que se identifica por ingerir muy pocas calorías, pero sobre todo por contarlas todas y sentir culpa al comer. La bulimia es un TA que se caracteriza por comer grandes cantidades de comida en un corto periodo de tiempo a escondidas y no tener el control de parar de comer y después aplicar un método para evitar engordar: como el vomito, los laxantes, el ejercicio excesivo o el ayuno y también viene acompañado de un sentimiento de culpa después de ingerir el alimento.

Es por esto que yo nunca me di cuenta de que estaba enferma y que lo que hacía me estaba matando. Intento entrar a tratamiento, pero la verdad es que solo he ido una vez (puesto que aun siento que no puedo traicionar a Ana y a Mia, es algo muy complejo), la cual me confirmaron que tengo bulimia, y analizando el pasado llegue a la conclusión de que tenia anorexia. Llegue a pesar 52 Kg y sentía que me faltaba bajar 3 Kg, pero estoy casi segura que si hubiera llegado a pesar 49 Kg, seguiría queriendo bajar otros 3 Kg. Ahora (como ya dije) peso 60 Kg, mi prima es nutrióloga y dice que mi peso ideal es entre 55 y 65 Kg, pero yo me sigo viendo gorda. Ese es otro síntoma, que a pesar de ser delgados, las personas con TA se sienten gordas.

Le comenté a la psicóloga q nadie me creería que tenia bulimia puesto que yo no soy tan delgada.

La psicóloga me dijo:
“La extrema delgadez no es un síntoma de un TA, mas bien es un signo de que la persona esta grave”

Espero esto les sirva de información para prevenir estas enfermedades tan duras en ustedes y es sus seres querido. Porque Ana y Mia no solo se llevan la grasa: se llevan tu alma, tus amigos, tus risas, tu mente, tu felicidad, etc… pero sobre todo se llevan tu vida entera.